Las aplicaciones se reflejan principalmente en su excelente resistencia a la corrosión y en su rendimiento de sellado, convirtiéndose en el contenedor preferido para transportar diversos químicos (como disolventes orgánicos, ácido alcalino, etc.). Los contenedores de medio granel de 1 metro cúbico son adecuados para almacenar y transportar diversas sustancias líquidas o en polvo.